El primer momento emocionante de la entrega del XXVIII Premio Internacional de Poesía FUNDACIÓN LOEWE, celebrada este jueves en el Hotel Palace de Madrid, lo protagonizó un ausente: Enrique Loewe Knappe, el patriarca de la firma, fallecido la semana pasada. Fue su hijo Enrique, impulsor del galardón, quien lo recordó.
El segundo llegó de la mano de Chantal Maillard, una poeta poco dada a la celebración pública de la literatura pero que, sin embargo, aceptó presentar la obra de Carla Badillo Coronado (Quito, 1985), ganadora del premio a la Creación Joven, tras encontrar en El color de la granada “palabras desprovistas de artimaña”. En su opinión, la escritora ecuatoriana es “alguien que sabe que un poema no se hace, se encuentra. Alguien que recuerda que un poema es algo humilde”. Advirtió de que los premios son armas de doble filo: pueden distraer tanto como iluminan. Le deseó a Carla Badillo que no se distraiga, “que aprenda a pasar desapercibida cuando la iluminen los focos”. Carla, por su parte, habló de la poesía como de su trinchera “frente a la vida, frente a la muerte y frente a mí misma”.
Llegó entonces el tercer momento de emoción (y de humor) del mediodía. Lo convocó el escritor cubano Abilio Estévez al presentar a su amigo Víctor Rodríguez Núñez (La Habana, 1955), ganador del Premio LOEWE en esta edición. Ambos coincidieron en la capital cubana durante los años ochenta en la redacción de la revista cultural El caimán barbudo, en la que el ganador ejercía de director y él, dijo, de distraído corrector de pruebas. Estévez glosó el libro de su amigo recordando que “entre las nubes nadie es extranjero” y en la noche del destierro “también amanece”. Rodríguez Núñez, por su parte, citó a José Martí para subrayar que “la poesía es más importante que la agricultura” y terminó leyendo el poema que cierra despegue, el libro premiado: “mas este espacio tiene su compás / ni la muerte se apura llega tarde / por un sitio decente / a sacudir el ser con un trapito”.
Fotografía: Enrique Loewe, Carla Badillo Coronado, Víctor Rodríguez Núñez y Sheila Loewe © Uxío da Vila.
Felicitación a los poetas premiados. Y a la Fundación Loewe por mantener este Certamen.
Gracias. Sigan. Gracias.
gracias por la cultura, el arte